jueves, 2 de agosto de 2012

El Caballero sin nombre


Un día en la ciudadela de un castillo llego un hombre alto de larga cabellera negra, vestido con una armadura negra y una capa del mismo color, de sombría expresión en el rostro, armado únicamente con una gran espada cuya hoja tenía un color rojo como la sangre y la empuñadura era muy larga para el tamaño de la hoja teniendo casi su mismo tamaño esta tenía por color un marrón muy oscuro casi negro su espada y armadura estaban muy gastadas tanto que al verlo daba la impresión de ser alguien que había peleado mas de mil batallas .El hombre entro en un bar a altas horas de la noche, bebió una gran jarra de cerveza le pago al cantinero y se marcho sin decir nada. Tras salir del bar observo como una Hermosa Joven y una anciana de aspecto cansado que la acompañaba eran acosadas por dos hombres jóvenes que las amenazaban con una daga para robarles sus posesiones sin pensarlo el caballero corrió y se abalanzo sobre el hombre que sostenía la daga en sus manos dando así  a las dos mujeres tiempo para escapar y refugiarse dentro de su casa, las mujeres continuaron observando al caballero por la ventana de su casa y vieron como este derrotaba a los dos hombres  sin siquiera utilizar su espada, cosa que impresiono mucho a las mujeres pues esto podía haberle facilitado mucho las cosas. Luego de acabarlos siguió su camino y desapareció del pueblo. A los pocos días la anciana y la joven estaban comprando algunas cosas en el mercado del pueblo mientras la anciana se encuentra con una vieja amiga y le cuenta con detalle lo sucedido y un hombre que no pudo evitar escuchar la conversación entre las dos mujeres interviene y les cuenta que lo que vieron fue al caballero fantasma quien no es realmente un fantasma pero es apodado así porque no habla con nadie y por su apariencia este hace muchos años era un joven caballero de un reino lejano el cual fue maldecido por una bruja por matar a su hijo el cual era un villano en su ciudad. Haciéndolo inmortal pero también haciendo que todo aquello que el amara se destruyera  y así el caballero rondara de reino en reino por la eternidad sin poder quedarse en ninguno para no hacer que ningún inocente pierda la vida por esa maldición.

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